Recomendaciones para la primera impresión de presentación del Perfil LinkedIn
Foto de perfil:
Tonos claros y con buena resolución de visualización.
Se observe una imagen desde el ancho de los hombros hasta el rostro.
Expresión facial amigable, con buena postura donde se perciba una actitud positiva y demande confianza.
Apuesta por un fondo de la imagen de perfil lo más homogéneo y simple, el objetivo es resaltar tu imagen y no generar otra distracción con un fondo que no aporte nada de valor.
Foto de portada de perfil LinkedIn:
Imagen que relacione algún proyecto trabajado, del cual te sientas orgulloso por su calidad.
No incluyas información de contacto que no aporte nada de forma profesional.
Cuida los detalles, tonos de colores y tamaño de la imagen que presentaras.
Estructura de un buen perfil:
Apuesta por la clasificación de funciones, áreas, trabajos, experiencias y más, conseguirás un perfil más organizado y visualmente más apetecible.
Justificar de forma profesional el historial laboral.
Describe de forma ascendente según el nivel de responsabilidades (si es el caso), la evolución de cada cargo laboral que estuvo bajo tu responsabilidad.
Crea un apartado solo para las responsabilidades, funciones o tareas ejecutadas durante su experiencia laboral.
Describir los periodos laborales, es decir, especificar las fechas de ingreso y salida de cada puesto laboral ejecutado con anterioridad.
Si posees referencias laborales, muéstralas.
Anexa las certificaciones, cursos, voluntariados realizados, que posean una relevancia e impacto en el campo laboral que postulas.